Adaptación: TODA CLASE DE PIELES
Había una vez hace muchos años en un lejano
país un rey y una reina que tenía muchas ganas de tener un bebé. La reina por fin
se quedó embarazada y nació una niña preciosa, rubia y de ojos azules.
Su madre al nacer le dijo al rey, cuando nuestra hija
sea mayor hemos de entregarle algunos regalos que sean muy valiosos y pueda llevar encima, así la veran como la princesa más bella de todas.
La madre pensó, yo le regalaré un collar con brillantes valiosas
de colores, y le regaló uno blanco, uno rosa y uno verde.
Y el rey pensó yo le regalare algo que le guste
mucho y entonces dijo: ¡a mi hija le encantan los vestidos! asique le hare tres
vestidos preciosos, un vestido tan dorado como el sol, otro tan plateado como la luna y
otro tan brillante como las estrellas y para que nunca tenga frío le regalaré
el abrigo más calentito de todo el reino, el abrigo de toda clase de pieles.
La princesa estaba muy contenta con sus regalos
pero un día un pájaro muy travieso apareció en la ventana de su habitación y con
su fuerte pico se llevo volando el vestido tan plateado como la luna. Ella no sabía qué hacer y pensó que si se lo
decía a su padre se pondría muy triste. Asique se escapó del reino sin decirle
nada a sus padres, cogió sus otros dos vestidos, su abrigo de toda clase de pieles
y sus brillantes, no fuera a ser que algún ladrón volviera a quitarle alguno de sus
regalos.
Corrió y corrió para seguir aquel pájaro travieso que
le había quitado su vestido y el pájaro cansado de volar dejó el vestido en la
rama de un árbol.
La princesa lo cogió, y cuando quiso regresar al
reino, se dio cuenta que se había perdido y que era de noche, por lo que decidió
pasar la noche en una cueva.
En medio de la noche, la princesa empezó a oír
pasos, era un señor a caballo y ella asustada se tapó con su abrigo de toda
clase de pieles. El hombre le preguntó a la princesa como se
llamaba, estaba sucia y despeinada pero ella no dijo nada, ya que no quería regresar
al reino porque sino su padre se enfadaría.
Aquel señor la montó en su caballo hasta un reino
que no se parecía al suyo y le dijo que él era el cocinero del reino que había
salido a buscar setas.
La princesa
se quedó más tranquila al escuchar sus palabras y cuando llegaron al reino, el
cocinero le dijo a la princesa que ella
le ayudaría a preparar una sopa muy rica para el príncipe de aquel reino.
De pronto en
uno de los pasillos vio al príncipe y pensó que era el príncipe más bello que
había visto nunca y que quería casarse con él y decidió que cada noche le
pondría uno de los brillantes que le había regalado su madre en el plato de sopa
para despertar su curiosidad. El príncipe al encontrarse todas las noches un brillante de un color
le pregunto al cocinero de quien podían ser.
Aquel
príncipe se dio cuenta de que unos brillantes tan bonitos solo podían ser de una joven
muy bella. Y mirando a la princesa la dijo: Estos brillantes son tuyos, porque
aunque seas pobre y no tengas joyas ni dinero, solo una joven tan bella como tú podría llevarlos, la besó y
sacó un precioso anillo de su bolsillo pidiéndole que se casara con el.
Para el día
de la boda la princesa quería ponerse uno de sus tres preciosos vestidos y preguntó al principe cual quería que se pusiera y él le contestó: No importa que vestido te pongas, tu ya eres tan dorada como el sol, tan plateada como la luna y tan brillante como las estrellas.
¡Y colorín
colorado, este cuento se ha acabado!
ARGUMENTACIÓN SOBRE LOS CAMBIOS REALIZADOS
Esta adaptación
del cuento “Toda clase de Pieles” va dirigido a niños de 4años de Educación
Infantil. He intentado no cambiar el hilo de la historia, solo quitando o
sustituyendo aspectos que no son recomendamos bajo mi punto de vista para esta
edad.
He realizado
algunos cambios, como por ejemplo suprimir la muerte de la madre. Ya que es un
aspecto que puede ser algo trágico para los niños.
He cambiado
las palabras medalla, rueca y anillo por brillantes de colores ya que es un
vocabulario más fácil para el niño.
No he
mencionado que el padre quisiera casarse con su hija, ya que no me parece un
tema muy apropiado para contar. En vez de eso he puesto que a la niña la roban
uno de sus vestidos y tiene que escaparse del reino.
En la parte
en que los cazadores descubren a la princesa lo he sustituido por el cocinero
del reino, ya que no asusta del mismo modo.
Por último
decir que no he mencionado la parte del baile, ni los vestidos hasta el final
ya que considero que ese aspecto alarga demasiado la historia y pueden cansarse
demasiado rápido.También he cambiado la parte en que la princesa ha de llevarle
la sopa al príncipe y el príncipe la descubre, ya que también excedería la
historia.
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